Según un estudio de la Universidad de Gotemburgo, los consejos sanitarios digitales no son suficientes para diagnosticar de forma segura la amigdalitis. La confianza no será suficiente, lo que aumentará el riesgo de un tratamiento excesivo o insuficiente del dolor de garganta.
La amigdalitis es un motivo común de visitas al médico y prescripciones de antibióticos en atención primaria. Para determinar si un paciente necesita antibióticos, los médicos utilizan los llamados criterios centrales para la amigdalitis. Los criterios incluyen examen de fiebre, ganglios linfáticos sensibles e inflamados y amígdalas en los ángulos de la mandíbula.
Sin embargo, aún no está claro qué tan bien se pueden evaluar estos criterios durante las consultas de atención médica digitales en comparación con las consultas tradicionales en persona. Esta falta de evidencia científica se ha convertido en una preocupación creciente a medida que los consejos digitales sobre atención médica se vuelven más comunes.
Evaluación digital versus física
El estudio actual, publicado en la revista Enfermedades infecciosasexamina si las evaluaciones digitales son tan confiables como el examen físico para determinar si es necesario un tratamiento con antibióticos. El estudio incluyó a 189 pacientes que buscaron atención entre enero de 2020 y octubre de 2023 en clínicas de atención médica y clínicas de atención de urgencia en la región de Västra Gotaland, Suecia.
Cada paciente del estudio se sometió a dos evaluaciones: una evaluación médica digital vía video y un examen físico realizado por un segundo médico. Los resultados muestran que los consejos digitales sobre atención médica no son suficientes para evaluar algunos de los criterios más importantes, como el examen de las amígdalas y los ganglios linfáticos.
Lo digital no es lo suficientemente seguro.
Una de las fuerzas impulsoras del estudio es Patrika Woldan-Gradalska, estudiante de doctorado en la Academia Sahlgrenska de la Universidad de Gotemburgo y médica residente en la Clínica Satella Healthcare.
“Nuestro estudio muestra que, aunque las consultas de atención médica digitales son convenientes para muchos pacientes, no son lo suficientemente confiables para diagnosticar la amigdalitis. Para garantizar un diagnóstico y tratamiento precisos, un examen físico sigue siendo importante”, dice.
Los autores trabajan activamente en medicina comunitaria y salud pública en la Academia Sahlgrenska de la Universidad de Gotemburgo y en FoUi Primary and Community Health Care en la región de Västra Gotaland, un recurso de apoyo para la investigación, la educación, el desarrollo y la innovación.