Los médicos han advertido contra las travesuras de dormitorio “vigorosas y prolongadas” después de tratar a un paciente con lesiones genitales potencialmente fatales.
El hombre de 53 años padecía una inflamación de la vena principal que recorre el eje del pene, lo que puede provocar coágulos sanguíneos potencialmente mortales.
La noche anterior había tenido una sesión de sexo duro con Viagra que había dejado la parte inferior de su falo extremadamente hinchada.
La piel estaba cálida y “sensible” al tacto, con una hinchazón visible debido a la acumulación de líquido.
El hombre, cuyo nombre no ha sido identificado, fue tratado con medicamentos antiinflamatorios y se recuperó por completo en unas semanas, pero sus médicos están utilizando su caso como advertencia.
Dicen que los médicos deben tener cuidado al administrar Viagra a pacientes que probablemente tengan relaciones sexuales intensas o que hayan tenido daños sexuales previos en sus genitales.
En un informe de prensa que reveló el caso, agregaron que la gente debería ser consciente de los “riesgos potenciales” de los medicamentos para la disfunción eréctil.
Aproximadamente 8.000 hombres en los Estados Unidos sufren traumatismos de pene cada año, siendo las fracturas de pene y los traumatismos por penetración los más comunes.
Lesión potencialmente mortal en los genitales de un paciente (foto de archivo)
El último paciente fue tratado en Turquía y su caso se publicó en el Journal of Radiology Case Reports.
El hombre afirmó que había tomado Viagra para su disfunción eréctil antes de tener relaciones sexuales “largas y vigorosas” con su pareja.
Le diagnosticaron oficialmente venas varicosas del pene, cuando las venas se hinchan y se hinchan. La lesión suele aparecer a las pocas horas de una relación sexual prolongada y las células inmunitarias se apresuran al lugar de la lesión.
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Esta inflamación hace que la vena se hinche y duela. También aumenta las posibilidades de coagulación de la sangre.
Después de una ecografía, el hombre fue diagnosticado y le administraron anticoagulantes y antiinflamatorios y se le pidió que se abstuviera de tener relaciones sexuales durante algunas semanas.
En el informe, sus médicos dijeron: “Aunque la enfermedad del pene menor no suele poner en peligro la vida, puede afectar significativamente la calidad de vida del paciente”. Por lo tanto, los médicos deben ser conscientes de los riesgos potenciales del uso prolongado de sildenafilo.
“Deben considerar factores predisponentes adicionales, como la lesión vascular provocada por la actividad sexual, en el tratamiento y la prevención de esta afección”.