Han surgido temores de que el Partido Laborista esté conspirando para aprobar rápidamente nuevos derechos de los trabajadores sin un debate o votación en el Parlamento.
Bajo la mayor reforma de los derechos laborales en una generación, los trabajadores podrán reclamar horarios flexibles desde su primer día en un nuevo trabajo y ganar el “derecho a desconectar” fuera del horario de oficina.
Los planes han alarmado a los líderes empresariales y predijeron una avalancha de casos judiciales presentados por empleados a quienes se les ha negado el permiso para trabajar cuatro días a la semana.
Anoche, The Times informó que, según el plan, los trabajadores podrían incluso demandar a los patrones por obligarlos a trabajar más de las 48 horas permitidas en su semana.
Pero a pesar de las preocupaciones, algunos elementos del plan para crear el llamado salario laboral podrían ser descartados sin que los parlamentarios y sus pares tengan voz y voto.
Han surgido temores de que el Partido Laborista esté conspirando para aprobar rápidamente nuevos derechos de los trabajadores sin debate en el Parlamento.
Bajo la mayor reforma de derechos laborales en una generación, los trabajadores podrán exigir horarios flexibles desde su primer día en un nuevo trabajo.
Los ministros se han comprometido a presentar un proyecto de ley sobre derechos laborales dentro de los 100 días posteriores a su toma de posesión para cubrir algunas medidas, pero también han dicho que otras se introducirán a través de legislación secundaria y directivas, que no requieren un debate o votación en la Cámara de los Comunes.
La ministra de Negocios de los Lores, la baronesa Jones de Whitchurch, admitió en una respuesta reciente a una pregunta escrita: “Ya se está trabajando para identificar y actuar a través de rutas legales secundarias e ilegales”.
Se produce después de que el gobierno intentara imponer recortes en los pagos de combustible de invierno sin votación, mientras se acelera la renacionalización de los ferrocarriles.
Anoche, el portavoz empresarial conservador Kevin Hollinrack dijo: “Ninguno de los ministros que realizan estos cambios ha dirigido jamás una empresa; ignoran por completo el mundo real en el que operan las empresas privadas”.
“Tratar de impulsar cambios tan radicales sin controles y equilibrios adecuados es un riesgo enorme”.
Un portavoz del gobierno dijo: “El proyecto de ley sobre derechos laborales, que se presentará en 100 días, será un paso importante en la ejecución del plan ‘Hacer que el trabajo sea rentable'”.