El gobernador del Banco de Inglaterra ha pedido una “reconstrucción” de las relaciones con la UE y advirtió sobre los riesgos comerciales globales tras la explosiva victoria electoral de Donald Trump.
Andrew Bailey insistió en que las “consecuencias” del Brexit no pueden ignorarse y lamentó el pobre desempeño de la economía desde la crisis crediticia de 2008.
En su discurso de anoche en Mansion House, Bailey insistió en que no tenía ninguna posición política sobre la decisión de abandonar el bloque.
Pero argumentó que la medida pesaba sobre UK plc y pidió al gobierno “agradecer la oportunidad de reconstruir la relación respetando la decisión del pueblo británico”.
En medio de los temores sobre la promesa de Trump de imponer aranceles comerciales a las importaciones estadounidenses, Bailey expresó su preocupación por el “impacto de los shocks geopolíticos y la fragmentación más amplia de la economía global”.
La Canciller Rachel Reeves se hizo eco de la posición en su propio discurso ante los líderes de la ciudad, subrayando el impulso laborista para un “reinicio” con Bruselas mientras producían un discurso aparentemente concertado.
Pero Reeves y Keir Starmer enfrentan un delicado acto de equilibrio mientras buscan estrechar los lazos con Trump y al mismo tiempo fortalecer los vínculos con la UE.
Andrew Bailey insistió en que las “consecuencias” del Brexit no pueden ignorarse y lamentó el pobre desempeño de la economía desde la crisis crediticia de 2008.
La Canciller Rachel Reeves se hizo eco de la posición en su propio discurso ante los líderes de la ciudad, subrayando el impulso laborista para “reiniciar” con Bruselas mientras producían un discurso aparentemente coherente.
Bailey dijo durante su discurso que “no adopta una posición sobre el Brexit per se”.
“Pero debo mencionar las consecuencias”, dijo. ‘Las cambiantes relaciones comerciales con la UE han pesado sobre los niveles potenciales de oferta.
‘El impacto del comercio parece ser mayor en bienes que en servicios, lo cual no me sorprende particularmente.
“Pero muestra por qué debemos estar atentos y acoger con agrado la oportunidad de reconstruir las relaciones respetando al mismo tiempo la decisión del pueblo británico”.
En un aparente guiño a la incertidumbre tras las elecciones estadounidenses, añadió: “El panorama ahora está empañado por los shocks geopolíticos y la fragmentación más amplia de la economía global”.
Bailey dijo que no había habido una “buena historia” en el Reino Unido desde 2008, en contraste con el desempeño de Estados Unidos.
La señorita Reeves dice que además de enfadarse Relaciones con Europa Quería mejorar las relaciones comerciales con Estados Unidos y China.
Dijo: “No nos retiraremos del Brexit ni volveremos a entrar en el mercado único o la unión aduanera, pero tendremos que restablecer la relación”.
Keir Starmer busca formas de estrechar lazos con la UE, aunque insiste en que el Brexit no se revertirá